“Nuestro adversario real es el Frente Amplio”

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La precandidata Verónica Alonso dijo a Revista Martes que cuestiona el cogobierno en la educación y propuso crear un sistema de premiación presupuestal para escuelas y liceos con mejores resultados. También habló de la devaluación de las FFAA y del “deterioro moral que ha generado el Frente Amplio en el país».

¿Cómo está viviendo la campaña?, en los últimos días fue objeto de críticas

Es muy desafiante, sabía que no iba a ser fácil. Esto es como remar en dulce de leche, lo tengo claro, pero también estoy convencida de que si yo quería hacer cosas distintas, tenía que salir de mi zona de confort. Quizás era más fácil arreglar mi lugar, pero creo que tenía que dar este paso porque el país necesita gente dentro del sistema político que renueve realmente, no que tenga 20 años menos, sino renovar desde las actitudes.  Cuando alguien tiene la libertad de decir lo que piensa, como es mi caso, porque no le debo nada a anide, molesta y es más fácil responder con golpes o críticas.

¿Por qué cree que se logró un clima de relativa armonía a la interna del Partido Nacional?

Porque todos hemos entendido que nuestro contrincante es el Frente Amplio y es tal el deterioro moral que ha generado en el país el Frente Amplio, después de quince años, que no nos olvidamos que nuestro adversario real es el Frente Amplio. También hay un reclamo de la gente, de blancos y no blancos que te repiten no se peleen traten de ganarle al Frente.   

¿Qué significa para usted esta precandidatura?
Para mí es un salto importante de una enorme responsabilidad y a veces hay que romper barreras, que entiendan que una mujer puede ser candidata. En 183 años de historia del Partido Nacional soy la primera precandidata, ese es otro obstáculo que yo tomo como desafío, no es que me impida avanzar.

¿Cómo vivió el hecho de haber sido insultada en la marcha del 8M?

Hay una fractura social que estuvo fomentada y generada por los propios gobernantes, que se encargaron de irnos dividiendo cada vez más, los buenos contra los malos, los ricos contra los pobres, esa división se fue profundizando y se fue agudizando esta cuestión, con rasgos de intolerancia, que nos hacen mucho daño. En la marcha me sentí discriminada. Cuando alguien escribe en un cartel que soy fascista, o que soy una traidora por pensar distinto, además de no conocerme se ve la profundización de esa sociedad dividida.   Muchas mujeres que estábamos allí no nos sentimos representadas por esos grados de intolerancia  y violencia.  Si me toca presidir este país, voy a defender el derecho de cualquier persona de afirmar lo que piensa y lo que siente pero siempre en un ámbito de respeto y paz, que creo que es lo que faltó en esa marcha.


«En la marcha me sentí discriminada. Cuando alguien escribe en un cartel que soy fascista, o que soy una traidora por pensar distinto, además de no conocerme se ve la profundización de esa sociedad dividida»

Foto: @esperanzaUY

¿Cuál es el rol que deberían tener las Fuerzas Armadas en el país?

Uno puede analizar si queremos más o menos Fuerzas Armadas, lo que no es bueno es que el debate esté teñido de resentimiento y revancha.  Creo en el rol de las Fuerzas Armadas, lo que ha representado históricamente. Habría que dar el debate completo, sin revanchismo. Habría que analizar por qué nuestras fuerzas armadas siguen siendo las más ninguneadas y devaluadas desde el punto de vista presupuestal y salarial. No podemos poner ciudadanos de primera y de segunda, las FFAA han sido completamente devaluadas.  


«Habría que analizar por qué nuestras fuerzas armadas siguen siendo las más ninguneadas y devaluadas desde el punto de vista presupuestal y salarial»

¿Qué opina de la destitución de Manini Ríos?

El presidente tiene la potestad de tomar la decisión que tomó pero lo hizo en un momento errado para buscar alguna conveniencia desde lo político electoral. Le hizo un favor a las cuotas internas de la fuerza de gobierno y no le hace bien a la sociedad, que ya viene bastante fracturada y dividida. Hay una concepción ideológica por parte del Frente Amplio desde el resentimiento. Hay esa cosa de lo mal que los milicos le han hecho al país, sin entender todo lo bien que también nos han hecho, sobre todo no quedándonos en un momento de la historia que indudablemente fue muy oscuro pero que hoy no todos tienen que pagar por aquellas cosas mal que se hayan hecho.


«Hay esa cosa de lo mal que los milicos le han hecho al país, sin entender todo lo bien que también nos han hecho»

En materia de educación ¿cuáles son sus principales lineamientos?

Lo primero es que el gobierno gobierne la educación y no lo sindicatos. Terminaría con el mal peso que han tenido los sindicatos, que han bloqueado la educación. Yo cuestiono el cogobierno, no solo para la Universidad de la República sino  en el sentido de que uno elige a un gobernante para que gobierne, pero resulta que en la educación no manda el gobierno. Primero vino Mujica y dijo “educación, educación, educación” y después dijo que no se lo dejaron hacer, después vino Vázquez y dijo que vamos a cambiar el ADN de la educación y terminó sacando para afuera a Filgueiras y a MIR. El primer punto sería volver a recuperar el gobierno de la educación en manos de gobierno.


«Yo cuestiono el cogobierno, no solo para la Universidad de la República sino  en el sentido de que uno elige a un gobernante para que gobierne»

El segundo punto sería más días de clase y más evaluaciones a alumnos y a docentes. No quiero el pase social para cumplir con un número, para decir estamos bien cuando estamos mal. Creo  que debe haber comunidades educativas, en una relación positiva, entre docentes, directores y padres y apostar a la meritocracia, premiar a aquellas escuelas y liceos que cumplen y tienen resultados, hablo presupuestalmente. No es lo mismo aquella escuela que tiene buenos resultados, que aquella que no los tiene, no es lo mismo aquel director que hace un esfuerzo para tener buenos resultados en el egreso, que aquel que no lo hace.


«No quiero el pase social para cumplir con un número, para decir estamos bien cuando estamos mal».

A lo largo de su candidatura siempre es cuestionada la distancia respecto de la Iglesia.

 Somos un Estado laico y voy a defender el Estado laico que tenemos en nuestro país. Cada cosa en su lugar. Una cosa es que yo reciba el apoyo de grupos que profesan una fe, grupos que me apoyan, evangélicos, católicos, judíos, que entienden que yo represento determinados valores, que son judeocristianos, el valor de la familia, de la honestidad, del respeto, del trabajo, del esfuerzo, del diálogo. Para mí son valores judeocristianos, para otros son valores tradicionales de la sociedad y para otros que no creen en nada, como me escribía alguien el otro día, son valores que quieren recuperar. No hay que confundir que yo reciba el apoyo es independiente de cuál va a ser el rol que cada uno tenga que cumplir en el gobierno.


«No hay que confundir que yo reciba el apoyo es independiente de cuál va a ser el rol que cada uno tenga que cumplir en el gobierno»

Foto: @esperanzaUY

Hay muchos grupos que entienden que este es el lugar en el que puedan militar, si consiguen los votos, estarán levantando esa voz. Algunos tienen la preocupación de que como en otros países hay grupos que han tratado o impuesto con su peso electoral de poner presidentes, es una preocupación, pero Uruguay es diferente a Brasil y Argentina.Somos países muy distintos, el peso de la propia Iglesia es mucho más importante, somos sociedades distintas.

A partir de la victoria de Bolsonaro parece haber habido una profundización en su prédica por defender  valores y contraponer ese modelo con el actual

Que hay una profundización hacia la defensa de valores es cierto, porque creo definitivamente que se devaluaron y creo que es un diferencial que yo siento como mujer, porque las mujeres somos generadoras de valores, somos el primer eslabón en una cadena. Si tenés gobernantes que dicen que los que robaron en serio fue en Brasil o en Argentina pero que acá fue  un cambio chico, estás devaluando el valor de la honestidad, de la honradez administrativa. Si un gobernante transmite que ese valor no es tan importante, ¿qué podemos esperar de la sociedad?


«Para mí son valores judeocristianos, para otros son valores tradicionales de la sociedad y para otros que no creen en nada, como me escribía alguien el otro día, son valores que quieren recuperar».

¿Cómo se imagina el primero de julio?
Teniendo el respaldo de la ciudadanía y armando el equipo para octubre, quiero ganarle al Frente Amplio y quiero se parte del gobierno del partido nacional para transformar al país.

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