El activista brasileño Jair Krischke dijo a Revista Martes que el asesinato de la Concejala de Río de Janeiro Marielle Franco revela la trama de corrupción en torno a las milicias y el dominio económico y político de las favelas. En Río de Janeiro solo se aclaran dos de cada cien homicidios.
La detención de los presuntos asesinos de la concejala Meirelle Franco mostró el poder político de la policía de Río Janeiro y la alianza entre las organizaciones criminales y el poder político. Elcio Vieira de Queiroz y Ronie Lessa -vecino y amigo del presidente Jair Bolsonaro- fueron detenidos el pasado martes por la Policía Civil, pieza clave para que la investigación cumpliera su cometido, según señaló a Revista Martes el historiador y presidente del Movimiento de Justicia y Derechos Humanos brasileño, Jair Krischke.
«De cada 100 homicidios en Río de Janeiro la policía aclara dos. Es la fotografía de la policía de Río de Janeiro»
Ronie Lessa es un policía militar jubilado, considerado el autor material del asesinato de la concejala, fue consuegro y vecino del presidente Bolsonaro. En tanto, Élcio Vieira es ex policía, expulsado de la fuerza, conducía el vehículo desde donde se efectuaron los disparos, que también acabaron con la vida del chofer de la dirigente del Partido Socialismo y Libertad, Anderson Gomes. Ambos acusados de integrar las milicias que operan en las favelas.
“En los últimos años estas milicias crecieron en Río de janeiro de una manera aterradora, dominan la vida en las favelas, desde el acceso al agua mineral, la conexión al cable, el acceso al gas, esta gente domina y por esta dominación se acercaron a Bolsonaro y sus hijos. Porque dominan las favelas pueden decir a quién deben votar y la gente vota”, señaló Krischke.
«Esta gente domina y por esta dominación se acercaron a Bolsonaro y sus hijos. Porque dominan las favelas pueden decir a quién deben votar y la gente vota»
“Después de casi un año se llega a estas personas. El que tiró los tiros, vive en un complejo privado, donde vive Bolsonaro de altísimo lujo, lo que torna inexplicable como un sargento jubilado de la policía militar que cobra unos siete mil reales mensuales (60 mil pesos uruguayos) puede tener una casa que vale más de cinco millones de reales”.
“La policía de Río de Janeiro no daba con los autores, a los que se llegó porque actuó la policía federal que investigó a los investigadores. Esta corrupción que hay en la policía de Río de Janeiro, hacía que nunca pudieran llegar a los autores. El comisario de policía, que en la conferencia de prensa comentó que uno de los autores era vecino de Bolsonaro fue cesado de su cargo. No es algo de este asesinato, de cada 100 homicidios en Río de Janeiro la policía aclara dos. Es la fotografía de la policía de Río de Janeiro”, afirmó.
«La policía de Río de Janeiro no daba con los autores, a los que se llegó porque actuó la policía federal que investigó a los investigadores»
Krischke hizo referencia a los 117 fusiles que fueron encontrados durante los allanamientos vinculados a Ronie Lessa, considerado un tirador de alta precisión durante su pasaje por la policía militar: “Esos fusiles son fabricados en Alemania para los fusileros navales norteamericanos, no está disponible en el mercado brasileño».
Cada fusil de estos vale tres mil dólares, lo que muestra el poder económico y político de las milicias, que dominan la favela, eligen ediles, diputados provinciales y nacionales, porque tienen el control de la comunidad”.
“Ahora se sabe quién ejecutó, pero necesitamos saber quien mandó a matar a Mairelle y por qué razón. Porque para dilucidar un crimen hace falta saber la razón del crimen».