Médicos proponen un sistema de rotación para trabajar una semana y descansar otra, para que el personal de la salud no se vea reducido cuando llegue la peor parte de la pandemia. Además proponen llevar más personal hacia emergencias y CTI para atender la sobredemanda que generará el COVID-19. También están trabajando en opciones que permitan que trabajadores de un centro de salud puedan trabajar en otro si se los requiere.
Según explicó el vocal del Sindicato Médico del Uruguay, Federico Preve, a Revista Martes los planteos se realizaron en el marco del grupo de trabajo que funcione en el Comité de Crisis para que todo lo que tiene que ver con recursos humanos y materiales del sistema de salud, funcione en forma coordinada, uniforme y protocolizada. El ámbito de trabajo cuenta con el aval de ASSE, el MSP, las cámaras empresariales, FEMI, FUS y FFSP.
Por otra parte, Preve resaltó que los médicos están teniendo dificultades para acceder al testeo de COVID-19, lo que pone en riesgo además de su salud, la calidad de la cobertura de todo el sistema: “El testeo en el personal va a permitir que funcionemos menos como agente de contagio”. Lo que sigue es un resumen de la entrevista.
¿Cuáles son los planteos centrales en materia de organización de los recursos humanos de la salud para enfrentar el COVID-19?
Se planteó la rotación de todo el personal de salud, médicos y no médicos, para que puedan una semana quedar a resguardo en cuarentena en su casa y otra semana ir a trabajar. Lo hacemos centralizado porque como hay multiempleo en nuestro país, es importante que se haga de forma coordinada. El otro eje tiene que ver con la reorganización interna de todo el personal de salud en áreas que tienen menor demanda en estas circunstancias, particularmente las policlínicas y los blocks y destinar esos recursos humanos, tanto administrativos, técnicos y profesionales, para las áreas de mayor demanda que serían el área prehospitaliaria, ambulancias y a nivel territorial de primer nivel y en el área hospitalaria y emergencias y cuidados intensivos. Todos los recursos que tenemos en los lugares que se está trabajando menos, trasladarlos a las áreas que van a tener sobredemanda por la crisis del COVID.
«Todos los recursos que tenemos en los lugares que se está trabajando menos, trasladarlos a las áreas que van a tener sobredemanda por la crisis del COVID»
¿Y en materia de recursos materiales, cuáles son los principales planteos?
El principal es el testeo que sea rápidamente accesible para el personal de salud, que es la principal fuente de combate en esta guerra y es además es fuente de contagio. Tenemos que resguardar para que no se nos enferme la gente, porque eso lleva a que el sistema se sature antes, si tenemos menos gente trabajando. Además, el testeo en el personal va a permitir que funcionemos menos como agente de contagio. El otro punto en los recursos materiales tiene que ver con la compra centralizada de todos los equipos de protección personal para evitar el contagio.
«Tenemos que resguardar para que no se nos enferme la gente, porque eso lleva a que el sistema se sature antes, si tenemos menos gente trabajando»
¿El acceso al testeo ustedes hoy no lo tienen?
Se está trabajando pero aún resta que se le asegure el test al personal que tiene sospecha, porque tiene síntomas, porque tuvo contacto o porque estuvo en áreas donde hay pacientes con Covid para saber si tiene que ir a realizar una cuarentena o si puede seguir trabajando. No tenemos un acceso masivo. Tenemos la potencialidad del desarrollo a través de la Udelar y el Instituto Pasteur con el Clínicas, el Hospital Pasteur y Maciel, en articulación con el Ministerio de Salud Pública. En Asse sabemos que hubo un acuerdo con el laboratorio ATgen que están realizando test para el personal de los trabajadores de ASSE, pero falta aceitar. Todo eso lo queremos trabajar en este equipo que quedó creado en la Comisión de Crisis del Ministerio de salud pública.
«Aún resta que se le asegure el test al personal que tiene sospecha, porque tiene síntomas, porque tuvo contacto o porque estuvo en áreas donde hay pacientes con Covid para saber si tiene que ir a realizar una cuarentena o si puede seguir trabajando»
¿Cuáles es la situación en cuanto a la relación de dependencia de un médico respecto a la institución que lo emplea? ¿Un médico que trabaja en un prestador de salud puede ir a otro si lo necesitan o eso todavía no está dado?
Al día de hoy no existen dificultades con el personal. No hay un desbalance entre la demanda asistencial y la oferta de trabajadores, por ahora. Lo que sí nosotros queremos ya tener esos mecanismos aceitados para cuando falte gente en algún lado, poder enviarla. Esa es una de las cosas que queremos trabajar en esta comisión que se creó. Queremos habilitar esa posibilidad, que se pueden cruzar sin que exista problemas y asegurando los salarios.
«Queremos ya tener esos mecanismos aceitados para cuando falte gente en algún lado, poder enviarla»
¿Podría hacerse lo mismo con otro tipo de servicios? Por ejemplo que una empresa de traslados pueda trabajar para una mutualista con la que no tenga contrato.
La idea nuestra es justamente que este ámbito de trabajo emita recomendaciones para que en esta situación de crisis y emergencia se puedan realizar excepciones y que cuando faltan funciones se suplan por parte de otras empresas, para que no quede gente colgada sin cobertura de salud. Eso es lo que estamos solicitando al comité de crisis, nos parece sumamente trascendente para gestionar la crisis sanitaria este ámbito de trabajo con las empresas, con ASSE, con el Ministerio y con los trabajadores.
«Creemos que hay más casos reales en la comunidad de los que se están publicando, no porque haya ausencia de transparencia, sino porque todavía no estamos con una capacidad de testeo tan importante como la situación amerita»
Hace unos días en un tweet, el ex presidente del SMU Julio Trotchansky ponía en dudas la transparencia con la que se está manejando el gobierno.
Yo creo que se malinterpretó la posición del ex presidente Trotchansky, para mí él quiso expresar que aún nos falta realización de testeos masivos y podemos estar subestimando el número de casos, no intencionalmente, sino porque se hacen pocos test. Creemos que hay más casos reales en la comunidad de los que se están publicando, no porque haya ausencia de transparencia, sino porque todavía no estamos con una capacidad de testeo tan importante como la situación amerita. También reconocemos que entre la Universidad de la República, el instituto Pasteur y los ministerios se están haciendo todos los esfuerzos para empezar a hacer testeos a mayor escala, no creo que haya un ocultamiento explícito. Tenemos un subregistro por un desarrollo más bien lento de la capacidad de testeo.
«Mientras nosotros trabajamos y desarrollamos el sistema y desarrollamos los kits es la propia solidaridad de la gente, la que evita las muertes».
¿Cree que la gente está respondiendo adecuadamente a lo que se puede venir?
Creo que inicialmente la gente respondió de muy buena forma, la suspensión de clases, el cierre de shopping, de eventos públicos, de la cuarentena para mayores de 65 años, pero en los últimos días hemos visto mucho movimiento. Estamos muy alertas porque estamos recibiendo casos graves, el mensaje a la población debe ser que se quede en la casa y que utilice la tecnología para hablar con sus afectos, que no salga a la calle porque esto está recién empezando y si nos dejamos estar vamos a generar una saturación del sistema. Si nos quedamos en nuestra casa, vamos a evitar un contagio masivo y por lo tanto vamos a evitar muertes. Mientras nosotros trabajamos y desarrollamos el sistema y desarrollamos los kits es la propia solidaridad de la gente, la que evita las muertes.