Los argentinos que están llegando a nuestro país son un “grupo chico” de personas “bastante ricas relacionadas con Punta del Este”. «Uruguay está acá al lado, prefieren estar allá», dijo el canciller argentino Felipe Solá.
Los buenos resultados de Uruguay frente a la pandemia del Covid-19, le permitieron al gobierno de Luis Lacalle Pou pensar estrategias y así lanzarse en busca de ciudadanos argentinos interesados en cambiar la residencia y migrar hacia nuestro país.
Luego de la emergencia sanitaria, el gobierno uruguayo impulsó una serie de decretos que flexibilizaron la llegada de extranjeros e intentó cambios en la residencia fiscal.
Según datos de la Dirección de Migraciones, de la República Argentina y publicados por el periódico La Nación, en 2020 hubo 25.675 pasos fronterizos de argentinos con destino a Uruguay, pero las autoridades de ese país no pueden asegurar “con certeza” si esos argentinos que se están yendo residirán permanentemente en Uruguay.
«Los datos duros no indican que hubo gente que se fue y no volvió más a la Argentina. Lo que sí vimos fue tránsito fluido de argentinos que tenían residencia uruguaya, que viajaron con sus familias, y que quizás fueron y vinieron dentro de una misma semana a trabajar. Eso se llama tránsito vecinal fronterizo y es lo que nos indican los números”, dijo a ese medio la directora de Migraciones, Florencia Carignano.
Estos datos fueron respaldados por el ministro de Relaciones Exteriores del gobierno de Alberto Fernández, Felipe Solá, quien comentó este domingo por la noche que no ve un éxodo y que los que están saliendo “son pocos”.
“Solamente un grupo chico de argentinos, bastante ricos, que no tienen problema de vivir acá o en cualquier lugar del mundo. Uruguay está acá al lado, prefieren estar allá. Tiene una tasa muy baja de contagios, es otro mundo. Te das cuenta de que es otro mundo”, dijo en una entrevista con A24.
Sobre ese grupo de argentinos, comentó que tienen la posibilidad de “quedarse ahí el tiempo que tienen” y que están relacionados “con Punta del Este y la zona costera”.
Solá destacó que entre un país que tiene “muy poco Covid” y otro que tiene “Covid creciente” hay una “diferencia muy grande de estado de ánimo”. “Siempre hemos apreciado ir a Uruguay porque es como bajar un cambio”, añadió. A mediados de setiembre, la Cámara de Diputados aprobó el proyecto de ley que envió el Poder Ejecutivo para aumentar de cinco a diez años el plazo de lo que se conoce como “vacación fiscal”, y lo envió nuevamente a la Cámara de Senadores, donde se aprobarán los cambios realizados en la cámara baja y se enviará al Ejecutivo para su promulgación.
«El Uruguay ofrece un país de puertas abiertas con una política migratoria que otorga un marco de seguridad pública, jurídica y económica para todas las personas extranjeras que deseen radicarse» y es «intención del Poder Ejecutivo impulsar una política de estímulo a la inversión como instrumento idóneo para la generación de empleo y mejora del bienestar general», estableció Lacalle Pou en la fundamentación de este proyecto.